El Presupuesto General del Ayuntamiento para el año 2022 mantiene la política de los últimos años de aplicar una baja fiscalidad a las familias sanroqueñas, con impuestos como la contribución y el “sello del coche” en los mínimos que permite la Ley. La novedad será la bonificación del ICIO en un 95% para promociones en los núcleos de población históricos, con el objetivo principal de potenciar la construcción de viviendas para que los jóvenes se puedan emancipar.
El alcalde, Juan Carlos Ruiz Boix, ha señalado que “este viernes se llevará a Pleno Extraordinario la aprobación inicial del documento del Presupuesto para 2022, que se eleva a 73,3 millones de euros. Un año más, el Equipo de Gobierno que encabezo busca con estas cuentas atender las principales necesidades del municipio y propiciar la creación de riqueza y empleo”.
“El Ayuntamiento de San Roque -añadió- saldó en 2016 la deuda bancaria pendiente, de manera que hemos podido profundizar desde entonces esta política de fiscalidad baja para las familias sanroqueñas mediante el recorte de los tipos de los impuestos que más afectan a la población en general hasta los mínimos que permite la Ley. Pero, eso sí, también impulsamos una política de justicia y equidad fiscal mediante la revisión e inspección de los catastros, para que todos los contribuyentes paguen lo que les corresponde. Ni más ni menos”.
“En estos años -precisó el alcalde- se ha rebajado hasta el mínimo legal el Impuesto de Bienes Inmuebles (IBI) de naturaleza urbana, que se conoce popularmente como ‘la contribución’, situándose en el tipo del 0,40. Igual se ha hecho con el IBI rústico. El Impuesto de Vehículos de Tracción Mecánica (IVTM), o ‘sello del coche’, también está situado en el límite legal más bajo”.
“A ello hay que sumar -dijo-, la tasa simbólica para la renovación de los nichos de los cementerios y la rebaja de las tasas por la ejecución de obras menores, que afecta a cualquier familia cuando quiere realizar reformas en la cocina o en el baño, por ejemplo”.
“De cara a 2022 -apuntó Ruiz Boix- la gran novedad es la bonificación del 95% del ICIO (Impuesto sobre Construcciones, Instalaciones y Obras) para las promociones de viviendas públicas y privadas que se desarrollen en los núcleos de población históricos. Esto quiere decir, las que se lleven a cabo en San Roque Ciudad o en barriadas como Guadiaro, Taraguilla o Puente Mayorga, por citar unas cuantas, y no las promociones en urbanizaciones como Sotogrande o Alcaidesa”.
“La realidad -indicó el primer edil- es que en los últimos diez años no se han construido viviendas en nuestros pueblos, aunque sí muchas promociones en nuestras zonas turísticas. Así que esta bonificación no va a suponer una merma en los recursos municipales, y sí un estímulo para que los promotores de viviendas de renta libre o protegida elijan San Roque para sus proyectos”.
“Lo que queremos -manifestó- es superar el listón de 50.000 habitantes en 2050 de una manera sostenible y repartida entre los distintos núcleos de población. Que las personas que precisan vivienda, en especial los jóvenes que se quieran emancipar, puedan habitar un municipio con mucho potencial, que ha experimentado un gran cambio en los últimos años y para el que tenemos grandes proyectos de futuro”.
“En definitiva -señaló el regidor sanroqueño-, esta bonificación del ICIO no tiene otro objetivo que hacer nuestro municipio más atractivo en el futuro, profundizando así en los cambios positivos experimentados en los últimos diez años, en los que podemos enorgullecernos de que San Roque es otro, mucho mejor que el que nos encontramos en 2011”, concluyó Ruiz Boix.
Por su parte, el teniente de alcalde delegado de Economía y Hacienda, Ángel Gavino, recalcó que “en el Presupuesto de 2022 mantenemos una fiscalidad baja, que se puede sostener porque tenemos unas fuentes de ingresos estables y unas arcas saneadas. San Roque es un municipio que no tiene que subir los impuestos para llevar adelante un importante plan de inversiones, planes de empleo financiados con fondos propios y unas políticas sociales en beneficio de las personas con más dificultades”.
“Nuestro compromiso -continuó el edil- es seguir en esta línea, en la que el gasto esté justificado y sirva para mejorar las cosas, y no caer en el despilfarro. Así ha sido en los últimos diez años, y creo que la población sanroqueña puede percatarse de ello en el día a día”, concluyó Gavino.