El Ayuntamiento de San Roque, a través del Centro de Procesamiento de Datos, ha encargado a una empresa un estudio para analizar los consumos energéticos en las distintas dependencias municipales, con el objetivo de optimizar los mismos.
El concejal de Nuevas Tecnologías y CPD, David Ramos, adelantó que este contrato se integra dentro del proyecto Smart City, al que San Roque aspira.
Una Smart City, o ciudad inteligente, se puede describir como aquella ciudad que aplica las tecnologías de la información y de la comunicación (TIC) con el objetivo de proveerla de una infraestructura que garantice un desarrollo sostenible y un incremento de la calidad de vida de los ciudadanos.
Algunos ejemplos que puede percibir el ciudadano de proyectos Smart City son las tecnologías que mejoran el flujo del tráfico, el alumbrado eficiente mediante energía solar, o la construcción de viviendas equipadas con sistemas que permiten ahorrar en calefacción o refrigeración.
El propósito final de una Smart City es alcanzar una gestión eficiente en todas las áreas de la ciudad (urbanismo, infraestructuras, transporte, servicios, educación, sanidad, seguridad pública, energía, etcétera), satisfaciendo a la vez las necesidades de la urbe y de sus ciudadanos. Se trata, en definitiva, de encontrar el equilibrio entre el bienestar de los ciudadanos y la preservación del entorno.
Ramos señala que “por ello, desde el Ayuntamiento se considera primordial la optimización de los recursos energéticos por parte de los distintos edificios, pero como paso previo debemos analizar donde podemos mejorar”.
Las auditorias energéticas y la calificación energética en las dependencias municipales pondrán de manifiesto el potencial de ahorro energético existente. A resultas de las mismas, se pondrán en marcha una serie de actuaciones encaminadas a alcanzar mayores cotas de eficiencia energética en los distintos centros de consumo, promover el consumo responsable y promover las energías renovables.
Será, por tanto, un documento que servirá al Ayuntamiento tanto para desarrollar un plan de inversiones encaminado a mejorar las prestaciones energéticas, como a centralizar toda la información sobre los elementos consumidores de energía que les pertenecen y desarrollar así una política de mantenimiento y de gestión de la energía.
Con el presente trabajo se conseguirá que los edificios del Ayuntamiento sirvan de referente en la puesta en marcha de las iniciativas y buenas prácticas en eficiencia energética, así como en la gestión eficaz de los recursos energéticos disponibles.
El trabajo consiste en la realización de Auditorías Energéticas, Calificaciones Energéticas y sus correspondientes inventarios en diferentes edificios pertenecientes al Ayuntamiento, así como la elaboración de Propuestas de Inversión que incluyan las medidas de ahorro propuestas en el Plan de Inversiones que se elaborará para cada edificio.
Se realizará un informe previo por cada edificio, donde se justificarán las decisiones tomadas por la empresa adjudicataria sobre las medidas que van a ser evaluadas y descartadas. Este informe deberá ser analizado por técnico municipal, y deberá incluir la descripción de la situación inicial, medidas propuestas y justificación de las medidas descartadas en iluminación, en climatización y ACS; en la epidermis, y la incorporación de fuentes de energía renovables.
Todas las medidas irán acompañadas de un resumen de los principales datos energéticos, como la descripción de la medida; el consumo inicial y el esperado; la inversión necesaria; el ahorro energético y económico; así como el periodo de retorno simple de la inversión y la reducción de emisiones de CO2.
Tras el proceso, se ha adjudicado a la empresa Bettergy S.L., por un importe cercano a los 45 mil euros, la realización del estudio, que deberá estar finalizado en un plazo de seis meses.
El concejal de Nuevas Tecnologías y CPD, David Ramos, adelantó que este contrato se integra dentro del proyecto Smart City, al que San Roque aspira.
Una Smart City, o ciudad inteligente, se puede describir como aquella ciudad que aplica las tecnologías de la información y de la comunicación (TIC) con el objetivo de proveerla de una infraestructura que garantice un desarrollo sostenible y un incremento de la calidad de vida de los ciudadanos.
Algunos ejemplos que puede percibir el ciudadano de proyectos Smart City son las tecnologías que mejoran el flujo del tráfico, el alumbrado eficiente mediante energía solar, o la construcción de viviendas equipadas con sistemas que permiten ahorrar en calefacción o refrigeración.
El propósito final de una Smart City es alcanzar una gestión eficiente en todas las áreas de la ciudad (urbanismo, infraestructuras, transporte, servicios, educación, sanidad, seguridad pública, energía, etcétera), satisfaciendo a la vez las necesidades de la urbe y de sus ciudadanos. Se trata, en definitiva, de encontrar el equilibrio entre el bienestar de los ciudadanos y la preservación del entorno.
Ramos señala que “por ello, desde el Ayuntamiento se considera primordial la optimización de los recursos energéticos por parte de los distintos edificios, pero como paso previo debemos analizar donde podemos mejorar”.
Las auditorias energéticas y la calificación energética en las dependencias municipales pondrán de manifiesto el potencial de ahorro energético existente. A resultas de las mismas, se pondrán en marcha una serie de actuaciones encaminadas a alcanzar mayores cotas de eficiencia energética en los distintos centros de consumo, promover el consumo responsable y promover las energías renovables.
Será, por tanto, un documento que servirá al Ayuntamiento tanto para desarrollar un plan de inversiones encaminado a mejorar las prestaciones energéticas, como a centralizar toda la información sobre los elementos consumidores de energía que les pertenecen y desarrollar así una política de mantenimiento y de gestión de la energía.
Con el presente trabajo se conseguirá que los edificios del Ayuntamiento sirvan de referente en la puesta en marcha de las iniciativas y buenas prácticas en eficiencia energética, así como en la gestión eficaz de los recursos energéticos disponibles.
El trabajo consiste en la realización de Auditorías Energéticas, Calificaciones Energéticas y sus correspondientes inventarios en diferentes edificios pertenecientes al Ayuntamiento, así como la elaboración de Propuestas de Inversión que incluyan las medidas de ahorro propuestas en el Plan de Inversiones que se elaborará para cada edificio.
Se realizará un informe previo por cada edificio, donde se justificarán las decisiones tomadas por la empresa adjudicataria sobre las medidas que van a ser evaluadas y descartadas. Este informe deberá ser analizado por técnico municipal, y deberá incluir la descripción de la situación inicial, medidas propuestas y justificación de las medidas descartadas en iluminación, en climatización y ACS; en la epidermis, y la incorporación de fuentes de energía renovables.
Todas las medidas irán acompañadas de un resumen de los principales datos energéticos, como la descripción de la medida; el consumo inicial y el esperado; la inversión necesaria; el ahorro energético y económico; así como el periodo de retorno simple de la inversión y la reducción de emisiones de CO2.
Tras el proceso, se ha adjudicado a la empresa Bettergy S.L., por un importe cercano a los 45 mil euros, la realización del estudio, que deberá estar finalizado en un plazo de seis meses.
Bettergy es una organización comprometida con un cambio del modelo energético actual, que tiene como filosofía de gestionar la energía de manera eficiente como requisito imprescindible de las sociedades modernas, para evitar un agravamiento de los problemas medioambientales.
