El alcalde de San Roque, Juan Carlos Ruiz Boix, ha mostrado su apoyo y solidaridad a los afectados por el incendio de Sierra Bermeja. La primera autoridad pone a disposición del mando contraincendios los efectivos materiales y humanos que precisen para terminar con esta crisis.

El alcalde ha querido enviar toda la fuerza y ánimos a los efectivos y cuerpos de Bomberos, de Protección Civil y voluntarios, así como Policía Nacional,  Guardia Civil Civil,  y Policía Local que están actuando incansablemente en el incendio y mostró su colaboración para ayudar en las ciudades afectadas. Ruix Boix ha contactado con el Alcalde de Estepona y responsables de la Junta de Andalucía para ponerse a su disposición en lo que puedan necesitar. 

El Ayuntamiento de San Roque se pone a disposición de la Junta de Andalucía para aquello que precise para la extinción de este incendio, que afecta a unos municipios cercanos y con gran vinculación con San Roque. 

Lamentó que se haya tenido que desalojar los municipios de Jubrique y Genalguacil, ya que unos 1.000 habitantes de estos dos pueblos del Valle del Genal han tenido que abandonar sus casas por la cercanía de uno de los focos. 

Ruiz Boix lamenta que no ha bastado con el trabajo incansable de los 350 bomberos forestales con 20 vehículos pesados de extinción y 3 máquinas para frenar el avance de las llamas hacia Jubrique y Genalguacil. Estos pequeños municipios de unos 1.000 habitantes entre ambos en el Valle del Genal han tenido que quedarse desiertos por seguridad de sus habitantes. Emergencias 112 ha informado del desalojo preventivo completo de los dos. 

La empresa de Emergencias, con la Policía Nacional, la Guardia Civil, la Policía Local y los grupos de protección civil de Yunquera, Ronda, Algatocil, Moclinejo, Antequera, Teba y Canillas de Aceituno han desalojado todos los habitantes de Jubrique, después de que el mando operativo lo comunicara antes de las seis de la madrugada. 

Sobre las 9.00 horas, Emergencias comunicaba que también desalojaba a los casi 400 vecinos de Genaguacil, que fueron trasladados en autobuses a lugares seguros, donde esperan a que se controle el incendio y donde recibirán asistencia psicológica. 

La razón de estos desalojos es un nuevo foco cercano provocado por una nube de pavesas incandescentes. Es una ‘lluvia de fuego’, ya que los restos de los materiales que han ardido vuelan hasta que se prenden en contacto con el oxígeno del aire. Al caer provocan nuevos frentes en el incendio, que sigue descontrolado desde el pasado miércoles a las 21.00 horas en dos puntos diferenciados de Genalguacil a la misma hora. 

Los evacuados están siendo trasladados a distintos puntos de albergue en Algatocín, siguiendo una ruta prioritaria con el control, seguridad y vigilancia de la Guardia Civil de Tráfico por la carretera MA-8305. Allí se están filiando todos. El incendio ya rondaría los 2.000 desplazados de sus viviendas de forma preventiva.